Durante décadas, el mundo del cannabis se ha dividido en dos categorías principales: sativa e índica. Estas clasificaciones se han utilizado para predecir los efectos de cada cepa, con la creencia popular de que las sativas son energizantes y cerebrales, mientras que las índicas son relajantes y sedantes. Sin embargo, en los últimos años, este debate ha perdido relevancia gracias a los avances científicos y a una mayor comprensión de la planta. En este artículo, exploramos por qué la distinción entre sativa e índica ya no es tan importante y qué factores determinan realmente los efectos del cannabis.

Los orígenes del debate: Sativa vs. Indica
La clasificación de Sativa e Indica se remonta a los siglos XVIII y XIX, cuando los botánicos comenzaron a categorizar las plantas de cannabis según sus características físicas y orígenes geográficos.
Cannabis Sativa: Originaria de regiones ecuatoriales como Tailandia y Colombia, se caracteriza por plantas altas y delgadas con hojas estrechas. Se le asociaba con efectos cerebrales y energizantes.
Cannabis Indica: Originaria de zonas montañosas como Afganistán y Pakistán, se describe como plantas más cortas y frondosas, con hojas anchas. Se creía que ofrecía efectos sedantes y de gran potencia corporal.
Estas categorías se hicieron populares en la cultura del cannabis, especialmente en los dispensarios, donde se utilizaron para guiar a los consumidores en sus elecciones de productos.
El problema con la clasificación Sativa vs. Indica
Si bien la distinción entre sativa e índica ha sido útil en el pasado, los expertos coinciden en que esta clasificación es demasiado simplista y no refleja la verdadera complejidad de la planta de cannabis. He aquí por qué:
Hibridación: La mayoría de las variedades modernas de cannabis son híbridas, es decir, combinaciones de genética sativa e índica. Esto dificulta clasificarlas estrictamente en una u otra categoría.
Efectos no determinados por la morfología: Los efectos del cannabis no están directamente relacionados con la forma de la planta (altura, hojas, etc.), sino con su composición química, específicamente con los cannabinoides y terpenos.
Variabilidad individual: la experiencia de cada persona con el cannabis puede variar significativamente debido a factores como la tolerancia, el metabolismo y el estado de ánimo, lo que hace que la clasificación Sativa/Indica sea poco confiable.

Lo que realmente importa: cannabinoides y terpenos
Hoy en día, la ciencia ha demostrado que los efectos del cannabis están determinados principalmente por dos factores: cannabinoides and terpenos.
1. Cannabinoides
Los cannabinoides son compuestos químicos que interactúan con el sistema endocannabinoide del cuerpo. Los más conocidos son:
- THC (tetrahidrocannabinol):El principal compuesto psicoactivo responsable del “subidón”.
- CBD (cannabidiol): No psicoactivo y asociado con efectos relajantes y medicinales.
- Otros cannabinoides: Como CBG, CBN y THCV, que también contribuyen a los efectos generales.
2. Terpenos
Los terpenos son compuestos aromáticos que le dan al cannabis su olor y sabor distintivos. También influyen en los efectos de la planta a través de lo que se conoce como... “efecto séquito”. Algunos terpenos comunes incluyen:
- Mirceno: Relajante y sedante (se encuentra en cepas como Granddaddy Purple).
- Limoneno: Energizante y mejora el estado de ánimo (presente en Super Lemon Haze).
- Pineno: Mejora la concentración y la memoria (se encuentra en Jack Herer).

El futuro: perfiles químicos personalizados
En lugar de depender de las categorías Sativa e Índica, la industria del cannabis está adoptando un enfoque más científico y personalizado. Los consumidores ahora pueden elegir productos según sus necesidades. perfil químico (cannabinoides y terpenos) en lugar de su clasificación botánica.
- Pruebas de laboratorio: Many dispensaries and brands offer detailed reports showing the levels of cannabinoids and terpenes in each product.
- Efectos personalizados: Los consumidores pueden seleccionar productos adaptados a sus necesidades específicas, ya sea para relajarse, concentrarse o aliviar el dolor.
El debate entre Sativa vs. Indica es ahora cosa del pasado, dando paso a una comprensión más profunda y científica del cannabis. Hoy, lo que realmente importa es la perfil químico de la planta y cómo sus compuestos interactúan con nuestro cuerpo. En lugar de preguntarte si una flor es sativa o índica, concéntrate en comprender sus cannabinoides y terpenos para encontrar la experiencia que mejor se adapte a ti.